En el caso de al-Andalus, puede hablarse de cuatro tendencias. En primer lugar, la más utilizada fue la “tendencia Suhayl” y que debe identificarse con aquellas mezquitas que tomaban como modelo la aljama de Córdoba, en definitiva, la capital. En segundo lugar, el grupo más numeroso, es el que utiliza la dirección Sur. Hay una alquibla de los astrónomos, la de orientación Este, que se obtiene mediante la observación de la salida del Sol en los equinoccios. Finalmente, está la alquibla de compromiso, la tendencia Sudeste, que utiliza como indicador el orto del sol en el solsticio de invierno.
La orientación de la aljama de Córdoba parece que fue establecida a imagen de la Ka‘ba, pues el edificio andalusí está orientado a 152°, mientras que el de La Meca lo está a 150°. Las fuentes, sin embargo, no explican el proceso seguido, de modo que tal vez la orientación no estuviera determinada más que por el terreno y el curso del río…
Como se ha observado, esta misma orientación se repite en un número nada despreciable de mezquitas andalusíes. Pero la exportación de la orientación iba, en alguna ocasión, unida al estilo arquitectónico que da como resultado el que puedan encontrarse réplicas de esta mezquita. Es el caso de Bāb Mardūm (s. X), en Toledo, o bien un número considerable de mezquitas almohades del Magrib.
El caso de Medina Azahara podría considerarse el de la alquibla por encima de la estética. La simple observación del plano de este conjunto pone de relieve la voluntad de erigir una alquibla exacta sacrificando, para ello, la estética del conjunto. La actitud del poder es, en este caso, guardar las formas en la ampliación de la aljama de Córdoba, pero mostrar de una manera evidente el objetivo de construir un edificio orientado de manera exacta. Paradójicamente, lo que pasó en su tiempo por ser una alquibla exacta no lo es, en realidad, posiblemente por el problema que hemos citado anteriormente de la falta de coordenadas geográficas precisas.
Un caso parecido de “doble moral” es el de Granada, donde un mismo soberano, Yūsuf I (1333-1354), optó por seguir la dirección tradicional cuando se trató de orientar la Madrasa Yūsufiyya, situada delante de la mezquita aljama (s. XI) –símbolo social donde los haya-, mientras que se guarda bien de conseguir los servicios de un astrónomo (posiblemente Ibn al-Raqqām) para construir su oratorio particular, uno de los casos más logrados de orientación. (…)
Fuente: Centro de Estudios Moriscos de Andalucía
La fuente de esta entrada no es el Centro de Estudios Moriscos de Andalucía, sino Mònica Rius. Para una más amplia información: Mònica Rius, La alquibla en al-Andalus y al-Magrib al-Aqsà, Barcelona, 2000.